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Estadio Regional de Antofagasta: Una historia sin fin.

"Después de la tempestad siempre sale el sol", diría algún aprendiz de poeta en momentos de dificultad, donde la luz parece ser escasa y los problemas amenazan con arrasar cualquier reserva de esperanza. Pero con el sol no sólo llega la calma, también la claridad para ver y cuantificar el daño provocado por la indomable naturaleza. Aunque en Antofagasta, las tormentas son sólo un relato de otras latitudes, lo cierto es que nuestro querido Estadio Regional todos los años debe hacer frente a una de ellas. Quizás esta carece de vientos y lluvias, pero ambas coinciden con un panorama desolador tras su paso. El llamado "Verano Naranja" es el nombre que hace temblar a los amantes del fútbol, y razones no faltan. Este año, tras el último día de festival, los hinchas horrorizados fueron testigos del estado del césped, además de constatar el poco cuidado que hubo con la "delicada" pista de atlética.
Lo ocurrido, es una falta de respeto a una comunidad que hace alguna semanas participaba de la campaña del "Cholguan", y a los hinchas que trabajaron en su instalación. No es posible que para Club de Deportes Antofagasta, el Municipio presente tantas exigencias, pero para el "Verano Naranja" pareciera que todo esta permitido, incluso apagar el cigarrillo en la pista de recortan.
Si mi memoria no falla, el año pasado en el encuentro frente a Palestino, un jugador de dicho equipo "derramo" agua sobre el recortan, lo que genero el enojo de la empresa encargada de su instalación. Más tarde, esta fue la excusa para que nuestra cuidad quedara largos meses sin fútbol profesional, y el CDA iniciara un agustiso periplo en busca de una localía, que lo llevo desde la Pintana hasta Arica.
Pero eso fue el 2007, este año, una vez inaugurada la pista, al Municipio no le tembló la mano para dejarnos sin la tradicional "Noche Puma", por la ausencia de laminas de Cholguan que protegiera a la anaranjada inversión. El problema era sencillo y a la vez angustiante, si el Club no lograba solucionar esto, el CDA no jugaría de local este año. La preocupación entre los hinchas fue grande, así como la inoperancia y la falta de capacidad de gestión de los dirigentes, entonces nuevamente la comunidad salió al rescate de los "pumitas" con la campaña del Cholguan, y los hinchas, castigados a veces con súbitos aumentos en el valor de las entradas, se encargaron de instalarlas.
Por ello, después de todo lo anterior, ver fotografías donde la pista parece un basural, nos deja el sabor de lo indigno, pero bueno, el estadio no es nuestro y las reglas al parecer siempre serán aplicadas para nuestro lado. Eso es la pista, porque el césped, o al menos "esa cosa de color café" nos remonta a otra historia, una que nos caracteriza a nivel nacional como "el potrero de Antofagasta". Un karma que durante años parecía no tener fin, hasta que el técnico Fernando Díaz llama a un viejo colaborador, su nombre Patricio Bustamente, pero que los hinchas de cariño han llamado el "canchero" aunque el apodo de "santo" no sería exagerado. El 2007, en cosa de meses, transformo una de las peores canchas de Chile en quizás la mejor. Un verde exquisito, que nunca había visto en el Regional, fue la materialización de un milagro que hasta los más escepticos creían imposible. Antofagasta durante medio año, lucio un campo de juego alabado desde Santiago por comentaristas, técnicos y jugadores.
Hoy, los hinchas vuelven a prender velas a don Patricio, quien ha retornado a la cuidad pero esta vez contratado por el Municipio, tras renunciar al Club el 2007 por razones que por ahora no vale la pena comentar. El "canchero" nuevamente tiene que hacer un verde milagro, pero ese es su trabajo, como esta la historia de un Estadio que año a año sufre una verdadera tempestad, que a diferencia de los huracanes del Caribe, el nuestro tiene nombre y apellido. Quien lo sabe?.
Marcos Celedón G. Fuente: www.foropuma.cl

1 comentarios »

  • FELIPE AROCA said:  

    una verguenza ese alcalde